toma de contacto en un barrio seouliano

una ciudad grande, no; lo siguiente

moverse en metro

guiado por una simbologia muy compleja

gracias a los muchos mapas 

personas mayores vendiendo baratijas de todo tipo

unas coloridas y muy variopintas comidas

algo indefinibles la mezcolanza de sabores

de momento no muy picante, bastante pescado

y raras verduras, todo de golpe a combinar como se quiera

grande avenidas como autopistas, con callejas barrio-bajeras

el país de la tecnología con postes torcidos y marañas de cables

sorprende la cantidad de gente y la individualidad

pulcros y correctos todos, sumergidos en sus "sueños" 

este barrio: "Dongnimmun" conjunta las vidas de Corea

zona popular y trabajadora, torres colmeneras de nivel medio

tiendas de barrio y restaurantes locales con pequeñas piscifactorías

y chamanes budistas que aconsejan a sus consultantes

con algunas cruces católicas de neón

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en definitiva;

un pequeño gran lío de país

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